2 Immobles per a 3 habitacions més econòmics, En bon estat en Càlig

Casa de pueblo para reformar en el centro de la población de Calig.
La vivienda consta de 3 alturas distribuido en recibidor, cocina independiente, amplio salón, baño con bañera y solárium.
Cálig es un municipio de la provincia de Castellón, Comunidad Valenciana y perteneciente a la comarca del Bajo Maestrazgo.
Situada en el extremo septentrional de la Comunidad Valenciana, la villa de Cálig está situada encima de una colina de 123 m. sobre el nivel del mar.

Su término está formado por colinas con pendientes a veces pronunciadas y de escasas llanuras abiertas al cierzo, viento frío procedente de Aragón. Su clima es de inviernos suaves y veranos calurosos. Las alturas más representativas son las formadas por las colinas de la Tossa (169 m.) las Forques (185 m.) y la Somada (194 m.) el Mas de Vernet (204 m.).

Debido a esta singular distribución del terreno, es normal dentro del término de Cálig, en tiempo de lluvias, la salida de manantiales y pequeñas zonas pantanosas y la formación de numerosas acequias por donde se canalizan las aguas. En la vertiente norte, al lado mismo de la población, se encuentra el río Seco o rambla de Cervera, que procedente de la comarca de Los Puertos de Morella, recoge las aguas torrenciales y la de los barrancos que afluyen a su cauce.

R: 0239. CASA SITUADA EN EL PUEBLO DE CALIG UNA POBLACIÓN MUY ACOGEDORA . SE compone de planta baja de garaje para dos coches , planta primera cocina, salón/comedor , un baño , una habitación. segunda planta dos habitaciones, un baño, terraza y en la tercera planta un gran trastero y terraza.
Càlig
En la zona nororiental de la provincia de Castellón, a medio camino entre el mar Mediterráneo y las sierras interiores, se encuentra el municipio de Càlig cuyo término está accidentado por varias colinas y barrancos. Cuenta con un ambiente apacible y presenta lugares de interés natural como el paraje del Socorro y el cauce del río Seco. Las actividades agrarias todavía tienen protagonismo en la economía local, aunque se está desarrollando un incipiente turismo rural. Dispone de equipamientos sanitarios, educativos, culturales y deportivos. Entre su patrimonio histórico y arquitectónico destaca la iglesia parroquial de Sant Llorenç y la torre de Càlig.